Servicio Aéreo Guardia Civil

“Grande-Marlaska preside la celebración del 50 aniversario del Servicio Aéreo de la Guardia Civil” ha sido el titular de una reciente nota de Prensa que hemos recibido desde el Ministerio del Interior.

La misma hacía referencia a que el anterior, acompañado de Leonardo Marco que es Director General de la Guardia Civil o del teniente general Pablo Salas que ostenta el cargo de Director Adjunto Operativo, ha visitado las instalaciones que tienen en Madrid dentro de los distintos actos que se han organizado para conmemorar cincuenta años de actividad continuada en la que los agentes, ya sean pilotos como personal de mantenimiento o tripulantes, han trabajado con ahínco en beneficio de la sociedad española, dedicación que les queremos agradecer en estas páginas.

Ese personal, opera con helicópteros que apoyan a otras unidades de la Guardia Civil (GC) en todo tipo de actividades, colaboran en las misiones de rescate de personas que tienen lugar en zonas montañosas o costeras de España, y participan en todos aquellos dispositivos de vigilancia, seguridad o presencia aérea que se les encomienda.

La aportación que llevan a cabo es precisa y rápida, pues su disponibilidad puede hacer que se requiera la presencia de una de sus aeronaves en un determinado lugar con la máxima inmediatez, por lo que siempre están listos para llevar a cabo aquellos servicios, despliegues y misiones donde su presencia sea requerida. En estas páginas de Tactical Online os vamos a presentar algunos detalles de lo que les define y caracteriza.

 

Larga trayectoria

El Servicio Aéreo de la GC, conocido también por su acrónimo SAER, tiene como actual Jefe al coronel Emilio Guilló. Bajo su Mando trabaja un colectivo que a día de hoy tiene en su activo el haber realizado un número de actuaciones que supera las 100.000 y que incluyen la búsqueda de desaparecidos, las evacuaciones, los recates, la presencia en naufragios o la diligente lucha contra organizaciones que se dedican al narcotráfico.

La celebración de su aniversario, que se realizó el 15 de junio de 2023 y contó con la presencia del Ministro del Interior, tuvo lugar en la Base Aérea de Torrejón de Ardoz que está próxima a Madrid e incluyó un acto en el que se entregó una placa de reconocimiento a los familiares de los guardias civiles fallecidos en acto de servicio.

Así mismo, en las alocuciones, Grande-Marlaska destacó que este servicio representa el ejemplo perfecto de la mezcla de factores, capacidades y atributos que caracteriza a los miembros del Cuerpo, concretando que “al compromiso personal de sus integrantes se suma una preparación de alto nivel desde el punto de vista tecnológica y un afán por estar listos para afrontar los retos que exige un mundo en continuo avance”.

A lo largo de medio siglo, el SAER ha ido evolucionando y especializándose. Con el paso de los años se les han ido asignando cometidos relacionados con la seguridad ciudadana, misiones de vigilancia medioambiental o de la actividad pesquera, patrullas marítimas para el mejor control de costas y fronteras, vigilancias aéreas para proteger objetivos de interés especial, despliegues para transportar material y personal de unidades de élite -entre ellas la Unidad Especial de Intervención (UEI) o el Grupo de Acción Rápida (GAR)- o, entre otras muchas, todos aquellos servicios de carácter humanitario en los que su presencia ha sido necesaria.

Como apunte histórico, señalar que el primer referente de lo que son hoy hay que buscarlo en el año 1972. Se decidió entonces la formación, ubicada primero en la Base de Cuatro Vientos y después en la de Colmenar Viejo, de la designada como Sección de Helicópteros. El primer aparato MBB (Messerschmitt Bölkow Blohm) BO-105 lo recibieron el 9 de enero de 1973 y en junio de ese mismo año realizaron su primer servicio, en cometidos de orden público, en Pamplona.

En 1978 se les trasladó a Torrejón de Ardoz y se varió su nombre por el de Agrupación de Helicópteros (AHEL) que en 1983 tenía ya 13 aparatos de alas rotatorias asignados. Con el paso de los años se decidió regular su especialidad, lo que aconteció en 1999, y coincidiendo con el cambio de siglo recibieron algunos BK-117 cedidos del ICONA.

El ya designado SAER siguió su evolución con un cambio acontecido en 2007. Se decidió para el Grupo de Aviones la incorporación de aparatos de ala fija facilitó un cambio cualitativo muy importante tanto en aspectos de tipo operativo como en los de carácter geoestratégico, pues les capacitó para cometidos como los de vigilancia marítima que se desarrollan en puntos muy alejados de las costas propias. También se formó a los pilotos para operar desde navíos en navegación que contasen con la preceptiva pista de vuelo para sus tomas y despegues.

Un cambio más en su adaptación a los nuevos tiempos llegó en 2015 al formar a sus guardias civiles para ser operadores de sistemas aéreos controlados a distancia, los popularmente conocidos como drones y técnicamente designados RPAS (Remotely Piloted Aerial System). Un año después recibirían cuatro AS-365 cedidos por el Ministerio de Agricultura y Pesca y especializados para labores de vigilancia marítima; esta plataforma incluye ruedas que se escamotean en el fuselaje para hacer que su aerodinámica de vuelo sea mejor y están especialmente equipados con novedosos medios de vigilancia y observación electrónica.

En total, y tomando datos oficiales para nuestras explicaciones, deciros que sus medios y personal se ha visto involucrados en más de cien mil actuaciones de las que en 2022 se realizaron nada menos que seis mil. Son referentes de su historial las labores de auxilio y rescate tras la riada que arrasó el Camping “Las Nieves” de Biescas (Huesca) en 1996, su participación en operativos asociados a la catástrofe del petrolero “Prestige” en 2002 o más recientemente vuelos relacionados con la erupción de un volcán en la isla de La Palma en 2021 o la detección de varios narco submarinos en la zona costera del norte de España.

Por su labor, han recibido la Medalla de Oro al mérito de Protección Civil, la Gran Cruz de Caballero de la Orden del Mérito de la República Federal de Alemania y hasta la Medalla del Congreso de los Estados Unidos por haber participado en el rescate y salvamento de dos de sus oficiales en Sierra Nevada.

Organización capaz

Son habituales sus despliegues en el exterior o en actividades promovidas desde la Agencia FRONTEX que les llevan de forma regular a Mauritania, Italia, Grecia y otros países. Tienen en continuidad desplegado un helicóptero en Nuadibú (Mauritania), que se dedica a la lucha contra las actividades relacionadas con la inmigración ilegal, y sus aviones son habituales en la Base italiana de Sigonella para, dentro de la Operación “Tritón”, participar en las labores de vigilancia de la Unión Europea relacionadas con el tránsito ilegal de personas procedentes del norte de África.

La estructura del SAER del que os hablamos en estas páginas incluye en sus plantillas un número próximo a los trescientos efectivos y opera con una flota de unas cuarenta aeronaves de las cuales 3 son aviones y 38 helicópteros que han realizado a día de hoy una cifra que supera las 303.000 horas de vuelo. Le corresponde la organización, mantenimiento, coordinación y operación de los medios de vuelo de la Benemérita y la realización de cometidos como la colaboración con autoridades judiciales o el asesoramiento técnico en materia aeronáutica.

Disponen, tomando como referencia datos obtenidos de fuentes diversas, una capacidad aérea que se sustenta en unas cuarenta aeronaves que incluyen aviones de ala fija, como un Beechcraft Super King Air B350i o dos  Airbus CN-235MP adaptados con sistemas de vigilancia FLIR (Forward Looking Infra Red) y medios de gestión propios de los cometidos de patrulla marítima de largo radio de acción, y distintos modelos de helicópteros.

 

En 1973 recibieron los dos primeros MBB Bolkow BO-105 que fueron completados con otros más del mismo modelo y de los que una quincena aún seguiría en vuelo, material poco a poco complementado con ocho de los MBB/Kawasaki BK-117, cuatro de los Eurocopter AS-365N3 “Dauphin” o trece Eurocopter EC-135. Entre 2022 y 2024 está previsto que reciban nueve de los Eurocopter H135 -una evolución con cambio designación del anterior- con los que reemplazarán aquellos helicópteros más antiguos de la flota; por cierto los helicópteros son bimotores e incluyen accesorios como torretas FLIR, grúas para izado de personal, soportes para rappel y fast rope, altavoces y focos de iluminación o las novedosas gafas nocturnas binoculares compactas Micro ANVIS HELI de la compañía española NVLS que comenzaron a recibir en 2022.

 

Las aeronaves las maneja personal calificado como piloto de avión, piloto de helicóptero, mecánico de avión, mecánico de helicópteros u operador de sistemas RPAS. Los vuelos de helicópteros se hacen con una tripulación que suele estar compuesta por uno o dos pilotos y un mecánico que se encarga de operar la grúa si se despliega con ella. Por cierto, se han realizado últimamente cursos de especialización con objetivo de reforzar los conocimientos técnicos de los agentes financiados, en una cifra que se situaría en torno al millón de euros, con el Fondo de Seguridad Interior (FSI) de la Unión Europea,

Del SAER señalaros que se sustenta en dos elementos: Órgano Central y Unidades Periféricas. El primero, con sede en las instalaciones militares de la Base Aérea que el Ejército del Aire tiene en Torrejón de Ardoz comprende elementos como la Plana Mayor, el Grupo de Material (GRUMAT), el Centro de Adiestramiento y Estandarización Aérea, el Núcleo de Seguridad de Vuelo, las Oficinas de Prevención de Riesgos Laborales y Periférica de Comunicación, y la Agrupación de Vuelo en el que se engloban el Grupo de Helicópteros (GRUHEL), el Grupo de Aviones (GRUPAV) o el Grupo de Drones y Contradrones.

En el segundo, se engloban los Sectores, Unidades -una quincena- y Destacamentos Eventuales que, formados por un pequeño número de aparatos y poco personal, trabajan diligentemente desde un determinado emplazamiento para llevar a cabo todos aquellos servicios que surjan. Son el Sector Aéreo Sur con las Unidades Aéreas (UHEL) de Sevilla, Málaga, Granada y Rota; el Sector Aéreo de Levante con las UHEL de Valencia, Murcia y Palma de Mallorca; el Sector Aéreo Noroeste con las UHEL de León, Oviedo y La Coruña; el Sector Aéreo Noreste con las UHEL de Monflorite (Huesca) y Agoncillo (Logroño), y el Sector Aéreo de Canarias que reparte sus medios en las UHEL de Tenerife y Fuerteventura. Se han venido manteniendo Destacamentos Eventuales en Ceuta, Melilla, Senegal o Mauritania, siendo relevante el de Benasque (Huesca) para apoyar cometidos de la campaña de rescates estivales.

Para completar estas páginas afirmar que el SAER es hoy, tras cincuenta años de continua evolución y de consolidación de sus capacidades y medios, un recurso muy relevante tanto para la GC como para el Ministerio del Interior. En su evolución, a futuro, es más que previsible que sea ir adaptándose a nuevas tecnologías de medios aéreos que están por llegar y les servirán para seguir realizando sus misiones con una efectividad máxima.