Estructuras militares y policiales de distintos países llevan ya varias décadas experimentando con distintos sistemas de armas para su incorporación y uso. Últimamente, hay diferentes adquisiciones que se centran en varios tipos de municiones de 6 milímetros -6,5 “Creedmoor”, 6,8mm NGSW (New Generation Squad Weapon), 6mm ARC (Advanced Rifle Cartridge),…-, proceso que coexiste con compras de armas adaptadas a los más clásicos 5,56x45mm ó 5,45x39mm para los ejércitos de Alemania, Polonia o Rusia, habiendo recibido ya el Ejército de esta última 35.000 de los nuevos fusiles AK-12 con los que iniciar el reemplazo de buena parte de los antiguos AK-47 y AK-74.

A la vez que se abordan nuevos conceptos, hay compañías que trabajan, gracias a una capacidad de desarrollo tecnológico forjada a lo largo de muchos años de trabajo discreto, eficaz y bien estructurado, en la obtención de distintos tipos de municiones que podíamos definir en términos genéricos como de “alta capacidad” en lo que son sus prestaciones y uso potencial.

A la cabeza de ese grupo se encuentra la compañía suiza RUAG Ammotec  que propone un amplio catálogo de productos de nivel superior surgidos para satisfacer las más altas necesidades operativas de núcleos de carácter militar y policial. No sólo es importante el llegar a un objetivo para, de forma discreta, abrir fuego sobre él. Es importante también que los efectos de los proyectiles en aquellos que se busca alcanzar incidan en su neutralización eficaz e inmediata, incluso si éste se situa tras un cristal de un vehículo o una plancha de acero, evitando tanto cualquier reacción por su parte o que se produzcan efectos colaterales no deseados. 

Esas necesidades, y otras complementarias adicionales, hacen que no sean válidas municiones convencionales y que haya que decidirse, como ya muchos países están implementando desde hace años, por un uso más específico de cartuchos especialmente desarrollados para generar unas prestaciones muy concretas en una serie de blancos bien distintos, pues no es lo mismo tener que abatir a un delincuente que porte un chaleco antibalas con placa cerámica que actuar sobre un yihadista que haya secuestrado un avión y sólo se le vea a través de alguna de las ventanas del fuselaje.

Esfuerzos combinados

El holding de RUAG incluye varias líneas de trabajo relacionadas con el entorno espacial, el adiestramiento realista, la capacidad ofensiva de los ejércitos o las necesidades de munición de colectivos profesionales. Para estos últimos ha desarrollado una serie de procesos productivos que se centran en la obtención, tras una elaborada fase de diseño previo y de pruebas balísticas para verificar que las prestaciones son las pretendidas, de vainas, pistones, pólvoras y proyectiles. La combinación adecuada de los cuatro elementos básicos que conforman un cartucho permite configurar una munición determinada para unas prestaciones y capacidades concretas.

Estas últimas son las que realmente interesan a aquellos que, por sus cometidos o por el tipo de misiones que se les asignan, tengan que actuar con su fuego sobre personas o grupos enemigos. Buscarán precisión para alcanzarlos con el primer disparo. Efectos concretos que neutralicen la capacidad de reacción de sus objetivos. Discreción operativa asociada a armas provistas con supresor sónico. Gran eficiencia contra objetivos convencionales y no convencionales. Disposición de empleo en situaciones en las que el calor o la humedad pueda ser extrema, etcétera. Son factores que, combinados y como derivación de lo óptimo del diseño de las ojivas de sus proyectiles o de lo adecuado de la carga de pólvora que define cada tipo, definen a las gamas de municiones superiores que RUAG Ammotec tiene ya en su catálogo y que están disponibles en España a través de su distribuidor AASIAS.com.

Uno de los cartuchos que más difusión mundial tiene hoy es el 9x19mm Parabellum. En las últimas décadas le han ido surgiendo competidores pues se argumentaba su limitada capacidad de detención, aunque su uso sigue generalizándose en las armas cortas que muchos agentes llevan durante sus jornadas de trabajo habituales o en las armas largas de uso más clásico dentro de entornos militares y de núcleos policiales focalizados en una capacidad de reacción y respuesta más dinámica. Usado en pistolas, subfusiles o carabinas, este cartucho está generalmente pensado para un empleo a distancias cortas, que generalmente serán inferiores a los cien metros. Es óptimo para combinarlo con supresores que reduzcan el estampido sónico y reduzcan el fogononazo asociado a los disparos, ahondando en su discreción. Su coste reducido y facilidad de obtención en cualquier punto del planeta, han sido factores valedores de su difusión.

RUAG Ammotec fabrica una decena de tipos de municiones del 9x19mm distintas que están destinadas a usos dotacionales, a acciones como las de asalto policial, a adiestramientos realistas y a otras más.  En ellas encontramos vainas realizadas en aleaciones que combinan cobre, zinc o aluminio para conseguir un entorno especialmente robusto y estanco en el que situar la pólvora propulsora de doble base y un pistón iniciador de la deflagración, tanto el avanzado Sinoxid como el no tóxico Sintox (SX). Junto a esos elementos, y buscando una determinada balística y efectos terminales al impactar en distintos tipos de objetivos/blancos o después de atravesar diferentes tipos de materiales, encontramos al proyectil. 

Combinándolos se obtienen los cartuchos tipo FMJ (Full Metal Jacket) y FMJ SX que son más convencionales y se caracterizan por sus puntas de 124 grains que tienen un núcleo de plomo totalmente encapsulado para minimizar la exposición al metal del interior como para preservar la vida útil de los cañones. Más elaboradas son soluciones como las Action SXF que se caracterizan por proyectiles de 94 gr que no tienen plomo en su interior, son de muy alta deformación y están concebidos para conseguir una transmisión total de la energía alobjetivo minimizando los riesgos de efectos colaterales. Hay tres propuestas de los mismos que, manteniendo una excepcional precisión que hace que treinta impactos puedan incluirse en un círculo de menos de 2,5 centímetros disparando a cincuenta metros, se diferencian en su potencial para obtener perforaciones en bloques de gelatina inferiores a los 20, 30 ó 40 cm o en el hecho que uno incluye un elemento marcado que facilita los análisis forenses posteriores. La gama incluye otros con proyectil frangible o de plástico para prácticas, y el tipo HP SXF en el que se monta un proyectil de alta perforación que ofrece una balística terminal excelente.

El nuevo cartucho Action-6 que viene a tomar el testigo de la SeCa, presenta unas excelentes prestaciones y una balística terminal prácticamente idéntica, evitando la sobrepenetración. En febrero de 2021 estará disponible con certificación CIP facilitando su acceso a corporaciones policiales que deseen adquirirla en cantidades de 1.000 a 50.000 cartuchos.

RUAG ACTION 6

Action-4 sigue disponible con certificación alemana TR con unas prestaciones sobresalientes para dotación.

Distintas necesidades

Cartuchos Cal. 4.6×30

Buscando ahondar en esta última cualidad, han surgido los llamados PDW (Personal Defence Weapon) que son armas largas compactas caracterizadas por altos ritmos de fuego al poder disparar a ráfagas y por el uso de municiones tan avanzadas como las de 4,6x30mm que caracterizan a los HK MP7 que son de uso muy generalizado en diferentes colectivos específicos. 

Para armas recamaradas a ese cartucho, que combina unas cualidades óptimas de alcance intermedio y de gran energía para incidir en su efectividad al impactar al objetivo o en el hecho que su poco peso facilita al combatiente el llevar más cartuchos consigo, RUAG Ammotec propone siete modelos de cartuchos bajo la designación genérica SX. En ellos encontramos soluciones que ofrecen agrupaciones de menos de 3 cm a cien metros, una velocidad inicial de los proyectiles próxima a los 700 metros por segundo o el que puedan ser usados sin restricción en un rango de temperaturas que va desde -30º a +52º centígrados. El tipo FMJ monta un proyectil de 40 gr más convencional, el Action incluye uno macizo de 31 gr pensado para penetrar distintos tipos de objetivos y minimizar el riesgo de daños colaterales, el AP (Armour Piercing) resiste inmersiones y situaciones extremas y es capaz de penetrar blindajes tipo CRISAT -placa de titanio de 1,6mm complementada con veinte de Kevlar- de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) a 200 metros, el Training está pensado para prácticas en entornos de combate cerrado (CQB, Close Quarter Battle), el Subsonic destaca por su peso de 77 gr para lograr tanto una notable penetración de blindajes como un leve sonido al abandonar la boca de fuego de armas equipadas con supresores, el Frangible con un proyectil que se desintegra al impactar y es muy útil para ejercicios CQB, a la vez que el Blank, sin proyectil, ha sido diseñado para generar sólo el ruido propio que caracteriza a los disparos.

Se trata de una gama amplia con empeño focalizado en armas que generalmente serán usadas a distancias cortas y medias y que cubren tanto el espectro de la protección propia y de VIP’s (Very Important Person) como el de la neutralización de hostiles en los más variados escenarios.

Cartucho 5.56×45

De empleo más generalizado dentro del ámbito de la OTAN y de países afines es la munición del 5,56x45mmque se emplea tanto en fusiles como en ametralladoras ligeras, siendo su alcance efectivo genérico del orden de 400-500 metros, aunque hay colectivos -recuerdo a los SEAL (SEa, Air and Land) disparándolo contra placas metálicas a 700 yardas sin fallar su objetivo- que lo usan con eficacia a mayores distancias. Su gama incluye los tipos FMJ con punta M193 de 55 gr que se comporta especialmente bien en entornos urbanos y en armas con largo paso de estría en sus cañones, FMJ (M193) SX que minimiza la exposición al plomo de su ojiva, FMJ HA (High Accuracy) con proyectil de 63 gr que consigue mejor precisión que los anteriores menos pesados, Styx Action con uno de 69 gr que busca el mismo efecto que el anterior combinado con una gran transmisión de energía sobre el objetivo, HC (Hard Core) con punta SS109 caracterizado por el núcleo duro de su versátil proyectil de 62 gr que consigue agrupaciones de varios disparos inferiores a los 8,5 cm a 300 m, AP TC (Armor Piercing Tombac Jacket) optimizado para penetrar blindados de pequeño tamaño y de ser usado en entornos donde se puedan llegar a alcanzar temperaturas de 54º bajo cero, LF HC SX con proyectil de núcleo de acero y LF HC+ SX rediseñado para su empleo con ametralladoras ligeras, Frangible SX con proyectil desintegrable muy útil para prácticas realistas en entornos próximos, Tracer que genera un haz rojo que permite seguir la trayectoria del proyectil hasta el punto en el que toca al blanco, Frangible SJ (Semi Jacketed) SX con una punta semiblindada para evitar rebotes y Blank para simulaciones seguras.

Cartucho 7.62×51

Su gama para armas de empleo más genérico incluye las propuestas M43 y M80 de la munición de origen ruso 7,62x39mm clásica en armas como el difundido AK-47, versiones con proyectil FMJ y trazador del clásico 7,62x51mm (.308 Winchester) que disparan tanto armas de asalto como ametralladoras medias, o las versiones SR (Short Range), SR Solid SX, SR Tracer y SR Solid Tracer SX del 12,70x99mm (.50 Browning) con proyectiles rediseñados para ser usados con la máxima seguridad en ejercicios y prácticas que se desarrollen en escenarios de dimensiones reducidas. 

Hace poco, haciéndose eco de un mercado que busca proyectiles de prestaciones mejoradas sobre los clásicos, han introducido versiones especiales del ahora en boga .300 Blackout que puede dispararse desde fusiles de asalto o rifles buscando tanto un notable poder neutralizador como una notable discreción, derivada de una velocidad en la boca de fuego que es del orden de 300 metros por segundo -vuelo subsónico-, en el caso de recurrir a supresores. Ofrecen variantes como la Target con proyectil HPBT (Hollow Point Boat Tail) de 220 gr que ofrece un mínimo perfil acústico para ayudar a mantener la sorpresa, Final con proyectil de 200 gr que se desintegra al impactar, HV Ball con punta de 146 gr y caracterizado por su sellado integral que lo protege el caso de su inmersión en agua, o el HV Styx con proyectil de 130 gr diseñado para poder conseguir el mayor poder de parada posible en armas capaces de disparar ráfagas en fuego automático.

En adición a las gamas más amplias, Ruag Ammotec está en disposición de proponer soluciones como sus cartuchos del calibre 12/70mm del tipo Magnum Entry I provistos con un proyectil macizo de 502 gr para destruir cerraduras y bisagras con un disparo a muy corta distancia o los Magnum Entry II que incluyen uno de 417 que tiene los mismos efectos pero puede dispararse desde 30 metros para mantener en un nivel máximo la sorpresa.

La elección del “sniper”

Para aquellos que en el devenir de sus operativos tienen que empeñarse con armas capaces de gran precisión, les es óptimo contar con proyectiles que combinen esa cualidad a distancias extremas con distintos aspectos de versatilidad en lo que a discreción o efectos terminales se refiere. Sus diseños, promovidos con la designación genérica de SWISS P -por precisión- son lo que aquellos tiradores selectos y los binomios que les acompañan en sus despliegues necesitan. El contar con una munición fiable, precisa, eficaz y de óptimas prestaciones supone un punto especialmente positivo que hará que la misión pueda llevarse a cabo con las mejores garantías de éxito. En algunos casos no se tiene en cuenta lo determinante que puede ser usar una munición con garantías, como las de Ruag Ammotec o decantarse por otras más convencionales propias del espectro deportivo o cinegético.

Entre las propuestas del 5,56x45mm que se incluyen en su catálogo encontramos la Ball que monta un proyectil de 63 grains con recubrimiento de acero que está considerado como el cartucho más preciso de los de tipo FMJ al combinar mejores prestaciones de penetración con una gran energía cinética en boca, la Styx Action basada en un proyectil HPBT de 69 gr optimizado para agrupaciones de sólo 1,69 cm a trescientos metros manteniendo un muy alto poder de parada, la Target en la que sobresale el diseño HPBT de un proyectil concebido para alcances de hasta 600 m, la AP que recurre a un proyectil de carburo de tungsteno de 63 gr que es capaz de penetrar blindajes metálicos ligeros y la Final SR que recurre a un proyectil de 52 gr que se desintegra al impactar y es óptimo para disparos de corto alcance. Señalar que de las primeras cuatro de este último grupo mantienen una balística similar que hace que también lo sea la trayectoria, cualidad sobresaliente porque permite variar las prestaciones en diferentes acciones de fuego, y ante circunstancias y objetivos de lo más variado, sin tener que introducir modificación alguna en los elementos ópticos u optrónicos de puntería que se encuentren acoplados a las armas que los disparen. 

Más específicos son aquellos rifles y fusiles de asalto de precisión recamarados para aprovechar las buenas capacidades del calibre 7,62x51mm contra objetivos localizados a distancias de hasta ochocientos m, o un poco más allá si tenemos en cuenta algunas experiencias recientes de situaciones bélicas de combate. Proponen toda una gama tipo Match, que garantiza la mejor precisión con agrupaciones que en algunos casos se circunscriben a varios impactos en menos de 1,44 cm a trescientos m y que son totalmente compatibles en lo que es su uso en armas caracterizadas por poder abrir fuego a ráfagas. Son diseños como el Ball con proyectiles FMJ de 176 gr con recubrimiento metálico total, Target disponible tanto con proyectil HBPT de 168 gr que es un estándar clásico en los usados por los “sniper” en las últimas décadas como en una configuración HPBT de 175 gr que amplía su alcance en vuelo supersónico, Stryx Action que recurre a un diseño de 167 gr optimizado para conseguir el mayor poder de parada y el mínimo riesgo de alcanzar otros blancos colaterales, Final SR en el que el proyectil JHP (Jacketed Hollow Point) de 130 gr y punta hueca se desintegra al impactar causando grandes efectos en su objetivo, AP caracterizado por el diseño y masa de 196 gr de su proyectil para poder penetrar incluso las planchas de muchos de los blindados de ruedas y cadenas de uso más común en los estamentos policiales y militares, Tactical diseñado para penetrar vidrios o plásticos de gran grosor -ventanillas de aviones- sin variar su trayectoria ni fragmentarse y alcanzar su objetivo y dos Subsonic que incluyen uno con proyectil de 200 gr para incidir en el menor ruido y la máxima sorpresa posibles y otro en el que la masa de 240 gr transmite una notable energía al objetivo para batirlo de un único disparo sin darle tiempo a reaccionar. Todo los del 7,62×51, salvo los subsónicos, que se completan con el Subsonic Final que se caracteriza por su proyectil de 200 gr que se desintegra en el momento del impacto o porque es capaz de agrupaciones de sólo 11 milímetros a 100 m, han sido diseñados para generar trayectorias balísticas idénticas y así garantizar que siempre se alcanza el punto que marca el elemento de puntería.

Adaptándose a lo que el mercado demanda, la gama SWISS P comprende también buena parte diseños especiales Ball, Target, Stryx Action, Tactical y AP en los cartuchos 7,62×67 mm (.300 Winchester Magnum) y 8,6x70mm (.338 Lapua Magnum). Este último es un diseño hoy especialmente en boga porque en su variante con proyectiles HPBT de 250 y 300 gr es óptimo para batir objetivos a distancias próximas a los dos kilómetros de la posición del tirador, lo que ha hecho que núcleos de asalto policial o unidades de Operaciones Especiales militares lo tengan en sus arsenales. Para ambos colectivos proponen también sus API (Armour Piercing Incendiary), con un proyectil de 263 gr que combina en su núcleo carburo de tungsteno con titanio para obtener la doble capacidad de penetrar blindajes gruesos y de generar un pequeño incendio en los objetivos para saber con seguridad que han sido alcanzados, y los Subsonic en configuraciones de proyectil de 250 y 300 gr. 

Acabaremos estas páginas haciendo mención que también están en disposición de proporcionar cartuchos específicos para “sniper” en el .50 Browning, gama que incluye tanto el Training SX con proyectiles de 644 gr que se comportan especialmente bien en blancos blandos como los humanos como los HC SC en los que destacan sus ojivas de alta penetración de 748 gr o los API SC capaces de atravesar una plancha de acero de 22 mm situada a medio km del tirador.

RUAG AMMOTEC es distribuido en España por AASIAS.com

Este artículo se publicó originalmente en la Revista Tactical Online Julio 2020

Tactical Online Julio 2020